José José, tu voz fue y sigue siendo el abrazo que muchos necesitamos en los momentos más difíciles, y la celebración en aquellos instantes donde el amor nos llenaba el alma. Tus canciones nos enseñaron a ponerle palabras a lo que sentíamos cuando no sabíamos expresarlo. Con cada interpretación nos regalaste honestidad, fuerza y vulnerabilidad, y por eso sigues tan presente en la vida de quienes crecimos contigo. No hay día que tu música deje de acompañarnos; en cada rincón donde suena tu voz, el corazón se estremece y vuelve a sentir. Eres eterno, porque un artista que logra que millones de personas se reconozcan en sus canciones nunca se va. Gracias por habernos dado tanto, por haberte entregado completo en cada nota y por seguir vivo en la memoria y el alma de todos…????
Eres y serás la voz más grande de México. Gracias por regalarnos tu arte, Príncipe de la canción.
